Pero que listos somos los malagueños

No he estado nunca totalmente ni a favor ni en contra del botellón. Me explico,..estaba en contra de la cantidad de basura que generaba, en una zona tan bonita de la ciudad como es la plaza de la Merced. En contra de el ruido insoportable supongo para algunos vecinos (también vivo en el centro y lo sufro), en contra de niñatos descontrolados por ingerir a destajo alcohol sin más,…Pero a favor de las conversaciones al aire libre con tus amigos, con gente que te encontrabas allí de sábado en sábado solamente. A favor de ahorrarnos unos euros al comprar nuestra bebida en un super, y poder tirarte horas relacionándote sin montones de decibelios de música y achuchones alrededor como ocurre en algunos bares. Y podría hablar bastante más sobre este tema que ocurre tanto en esta como en otras ciudades de España, pero no es lo que me ocupa hoy en la entrada del blog.
Hace varios fines de semana, desde que está haciendo buen tiempo, que nos vamos a la Plaza Mitjana (también en el centro de Málaga) ha tomar algo. Es una práctica en apariencia bastante normal, pero ayer observamos que era como una especie de botellón a lo pijo. Aprovechando que hay mesas y sillas de los bares circundantes, estamos bebiendo en la calle (práctica que por lo del botellón está prohibida). No hay bolsas de hielo por el suelo, ni botellas de cristal y basura, ya que las bebidas las compramos en los bares de allí, y los empleados de estos recogen cascos de cervezas y vasos de plástico de estas mesas que nos rodean, pero en fondo estamos haciendo lo de siempre. Botellón camuflado pero civilizado, no? Nos relacionamos hablando al aire libre, les dejamos dinerito a los negocios, y no molestamos a penas a los vecinos ya que los edificios que rodean la plaza o son bares u oficinas.
¡¡¡Pero qué listos que somos!!!!